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El hilo de la conversación del alcalde Carlos Guzmán, de la Fuerza del Pueblo, con la jefatura del Partido Revolucionario Moderno empezó a deshilarse en reuniones sigilosas que ocurrieron previo a las elecciones municipales del 18 de febrero. En los círculos de la presidencia del PRM marcaron el municipio Santo Domingo Norte como una de las demarcaciones prioritarias que concluyó con una victoria de la diputada Betty Gerónimo sobre quien fuera candidato de la alianza Rescate RD.
La idea de la renuncia de Guzmán de la Fuerza del Pueblo –que finalmente se produjo este lunes bien temprano en la mañana– venía corriendo río abajo desde que en los círculos políticos se pudieron confirmar sus reuniones clandestinas con los comisionados perremeístas. En sus argumentos defiende con vehemencia el camino que empezó a cultivar como funcionario municipal cuando ganó la alcaldía en el proceso del 2020, cuando ganó como candidato del Partido de la Liberación Dominicana y poco después renunció para sumarse a la organización de Leonel Fernández.
«Desde entonces, inmerso en la lucha y los trabajos comunitarios, han visto mi esencia, conocido mi coherencia, que trasciende cualquier sigla partidaria, siempre poniendo de primero mi relación con ustedes» los munícipes.
Guzmán es un político coherente, como dice en su carta. No es una opción ejercer la política desde la oposición y fuera de las estructuras administrativas del poder. Esa coherencia a la que hace referencia lo llevó a mantenerse en el PLD hasta ganar en las elecciones del 2020, pasó a la Fuerza del Pueblo como alcalde en ejercicio y cuando se acerca el 24 de abril cuando tendrá que entregar el cargo a la diputada Betty Gerónimo, es probable que confirme su paso al PRM, a través de Justicia Social que preside el ex senador peledeísta Julio César Valentín.
Pero en la carta de renuncia publicada este lunes, el alcalde de Santo Domingo Norte asegura que su futuro político tiene otros planes: «Quiero decirles que en los próximos días anunciaré el inicio de un nuevo proyecto político, uno que nace de nuestras conversaciones, de nuestras luchas compartidas, y de la convicción de que juntos podemos construir una República Dominicana de mayores oportunidades».
Con una base electoral que cerró su participación en las elecciones municipales con casi 60 mil votos, Guzmán guarda la esperanza de contar con su soporte para continuar su carrera desde donde vaya a accionar dentro de poco. «Este paso lo doy con la certeza de contar con ustedes, con su apoyo, energía y fe en que podemos hacer política de una manera diferente. Juntos, forjaremos un futuro brillante para nuestra querida República Dominicana y Santo Domingo Norte».
Carlos Guzmán fue candidato de la Fuerza del Pueblo, contó con el respaldo de su antiguo partido como parte del acuerdo de la alianza Rescate RD, en la que también participó el Partido Revolucionario Dominicano (PRD). El domingo 18 de febrero se hizo esperar en las urnas: no fue a votar hasta pasadas las 4:00 de la tarde, poco menos de una hora antes que cerraran las votaciones.
Para el alcalde de Santo Domingo Norte ha sido una decisión «trascendental» tener que renunciar a la Fuerza del Pueblo. «He decidido cerrar mi capítulo con el partido. Esta no es una decisión que tomo a la ligera, sino un paso necesario hacia un futuro que hemos soñado juntos. Un futuro donde la coherencia, la transparencia y el trabajo incansable son los pilares de nuestra acción».
Carlos Guzmán es la conquista más reciente de un Partido Revolucionario Moderno que camina en terreno firme de camino a las elecciones presidenciales del 19 de mayo. Claro queda que la carrera –o sus intereses particulares– «trascienden cualquier sigla partidaria», para este alcalde en transición que no está dispuesto a ejercer el oficio desde la oposición.
