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Con un evento con muchas luces y muy colorido pero poca sustancia, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) juramentó a las autoridades elegidas bajo el método que no fuera el voto universal (por acuerdos y convención de delegados).
Pero me surgen dos preguntas ante el discurso del Presidente Luis Abinader que encabezaba este acto. ¿Cómo es que le piden a las bases que trabajen con entusiasmo saliendo a las calles si ni siquiera se han dignado en darles un empleo por el que trabajaron y con la total desconsideración del gobierno qué los hizo trabajar para llegar al poder y luego no tomarlos en cuenta?
¿Como se invita a los partidos minoritarios a formar alianzas o ser parte de un evento del gobierno cuando el PRM no ha sido capaz de cumplir los acuerdos con su propia base, van a tener capacidad de cumplirle a los de afuera si no ha sido capaz de cumplir con los de adentro a menos que sean de la cúpula?
No se dejen engañar, porque sufrirán el amargo destino de todo el que sudó la gota gorda en las calles para que hoy en día los popis gobiernen y no son tomados en cuenta los que invirtieron dinero, tiempo, transporte, recursos, votos y entusiasmo para ser dejados de lado ahora que están en el poder y se creen dioses que llegaron solos.
Embriagados de poder sufren una resaca que han hecho olvidar todos los maltratos a los que han sometido a su base y le han quedado mal a sus aliados, el que sabe que sólo gobernará 4 años no se concentra en sus aliados o sus bases, sino en favorecer a el círculo de los amigotes y velar por sus intereses primero.
Llamar a las bases a las calles e invitar a los partidos minoritarios a un evento cómo este, es una burla que quiere lograr un borrón y cuenta nueva, todos sabemos qué Dios no quiera y vuelven a ganar los engreídos del Palacio, le harán lo mismo a su gente, y lo harán peor por sentirse seguros desde su posición. Tanto el llamado como la invitación es un caramelo para las bases como para los partidos, respectivamente, mi consejo es que vayan a una organización que respete sus intereses y esfuerzos, que cumpla los acuerdos al tiempo que saca el país de la crisis, en su corazón las bases y los partidos saben cuál es el camino seguro para materializar esto, pero sobre todo saben que no es el PRM.
Además, viéndolo desde el ámbito electoral y del pueblo dominicano, ¿qué tiene Luis Abinader para ofrecer a la población y lograr una casi imposible victoria si su único recurso era el discurso anticorrupción y este ha caído por los casos de la actual administración, teniendo a la población decepcionada.
Cada día la gente se le está siendo difícil separar a Luis de su gabinete, que ha hecho un trabajo pésimo y no ha resuelto la crisis que afecta a la población, han fallado a su base, a los partidos que lo apoyaron y más importante al pueblo dominicano en estos casi dos años donde los problemas se han intensificado: el hambre, la delincuencia, los casos de corrupción administrativa, una justicia parcializada que evidencian un desgaste a destiempo, por lo que apoyar al PRM y la reelección, es apoyar una causa pérdida.
Una causa perdida favoritismos, las propuestas de campaña que no se lograron, los acuerdos qué no se cumplieron y las bases dejadas afuera, término este artículo con una frase del pintor y escritor español, Santiago Rusiñol: «Engañar a los hombres de uno en uno es bastante más difícil que engañarlos de mil en mil. Por eso el orador tiene menos mérito que el abogado o el curandero».
