
La reelección tenía su traje diseñado
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Desde antes de que el presidente Luis Abinader se juramentara el 16 de agosto de 2020, se leía en la proyección de sus planes, que había una estrategia de retención de la Presidencia, más allá del período de los cuatro años calendario gubernamentales, es decir, la línea directriz develaba que para cumplir con lo que estaba prometiendo en su discurso de toma de posesión, debía disponer de más de cuatro años dirigiendo el gobierno.
Fueron varios meses dilatando la respuesta, al punto de llegar en mayo pasado a fijar una fecha que no pasaba del mes de agosto, para responder si tomaría el camino de los presidentes dominicanos que han aspirado a la reelección.
En principio, el Presidente evadía manejando la técnica del «puenteo», una táctica para saltar directo a los temas que son de su interés y no responder a la cuestionante incómoda.
Lo cierto es que el traje de la reelección a nivel estratégico, desde el punto de vista técnico ya estaba diseñado, ¿cómo se puede evidenciar?, en que la mayoría de los ejes fundamentales de su gestión tienen un dimensionamiento de ejecución a largo plazo, y su espíritu al pronunciarlos, también denotaba una proyección largo placista de su accionar.
A pesar de que se ha mostrado abanderado de la institucionalidad, titulares como «Presidente Abinader lanza proyecto Santiago 2025 con una inversión de 42,000 millones de pesos en 4 años», correspondiente al 2021; o «Presidente Abinader da picazo de arranque de las primeras obras en Pedernales, con una inversión de RD$500 MM»; «Presidente Luis Abinader anuncia licitación del Tren Metropolitano del Gran Santo Domingo para el mes de julio», entre otros, anunciaban que estas trascendentes obras, también eran parte del legado que aspiraba inaugurar y ver en su biografía cuando adquiera el estatus de expresidente, además de que no eran ninguna ejecutable en solo cuatro años.
El anuncio de la inscripción de su precandidatura a lo interno por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), no fue una sorpresa. Lo que sí pudo serlo fue el día y la forma, porque el «boca a boca» rumoreaba que tal información sería comunicada por el próximo 16 de agosto, aprovechando la fecha emblemática del Día de la Restauración de la Independencia Nacional.
Parte de la táctica fue, al parecer, dar un golpe de efecto, y se trasladó al segundo destino donde reside mayor cantidad de dominicanos, y en la famosa y concurrida Parada Dominicana de New York, aprovechó el evento para socializar y hacer entrega de proyectos para la diáspora, al tiempo que en la isla se pasaba un video, estructurado para ser difundido en las redes sociales, donde comunicaba su aspiración a una repostulación. Al margen de esto, se notaba que el traje de la reelección estaba listo desde hace tiempo.