El transfuguismo pasa factura a tres extra partido en el PRM
Comparte Este Artículo
La definición del transfuguismo es un comportamiento por el cual un individuo se pasa de un partido político a otro por beneficios personales. en la mayoría de los casos llevándose consigo un cargo que logró con el apoyo de la estructura política a la que renuncia. Estamos observando que los últimos procesos internos de los partidos para elegir sus candidaturas en las diferentes posiciones electivas han estado marcados por divisiones internas, fricciones y desacuerdos por los métodos usados por las altas direcciones partidarias.
Las ausencias de métodos democráticos y participativos en las convenciones internas donde los dirigentes, miembros y simpatizantes se le concede el derecho de elegir a sus candidatos de sus preferencias para representarlos en las diferentes demarcaciones. En consecuencia, las altas dirigencias de los partidos prefieren utilizar métodos excluyentes de sus militancias como son las asambleas de delegados y encuestas que en sus mayorías son manipuladas, adaptadas a los apetitos antidemocráticos de las cúpulas de los partidos donde castran las aspiraciones legítimas de sus dirigentes.
Estamos frente a una realidad donde los autores llamados a preservar, promover y fortalecer la democracia interna partidaria están actuando en detrimento de la misma, incentivando a las divisiones y transfuguismo por los métodos utilizados para elegir y ser elegidos en los diferentes cargos electivos y posiciones dirigenciales de sus organizaciones políticas, donde la fidelidad partidaria de sus dirigentes se prostituye sin escrúpulo al mejor ofertante y al partido gobernante de turno donde el interés individual es el que predomina por encima del interés partidario y colectivo.
Los métodos de elección
Analicemos la última convención del Partido Revolucionario Moderno (PRM), que es bueno resaltar que ha sido el único partido que llevó a cabo una convención cerrada con su padrón de 3,089,689 militantes, que ha causado muchos comentarios a favor por parte de sus dirigencias la cual resaltan la participación de un 33% (1,026,047) militantes que tenían el derecho de elegir a su candidato presidencial y varios cargos municipales, entre ellos las alcaldías de Santo Domingo Este y Santo Domingo Oeste. Para el candidato presidencial, los perremeístas eligieron la reelección presidencial de Luis Abinader, que obtuvo 90.79% de los votos, imponiéndose a Guido Gómez Mazara, 5.56%; Ramón Alburquerque, 2.22% y Delia Josefina Ortiz que terminó con 1.42%. Dentro de las cosas positivas de esta convención es que se llevó acabo con la supervisión de la Junta Central Electoral (JCE), que garantizó resultados rápidos, confiables del proceso y a su vez en orden sin inconvenientes mayores sellando la unidad de ese partido.
Pero no todo es color de rosa en esta convención. Los partidos de oposición han estado atacando y exponiendo las debilidades del proceso con denuncias del uso de los recursos del Estado y resaltando las dos derrotas de los alcaldes Manuel Jiménez, de Santo Domingo Este, que se sembró en un lejano cuarto lugar con un 18.62%, derrotado sorpresivamente por Dío Astacio, con un 35.36%. En Santo Domingo Oeste nos encontramos que su alcalde José Andújar obtuvo 28.20%, perdiendo de Francisco Peña con un 35.27%. Para agregarle un poco de sabor y discordia al proceso vamos a mencionar la reserva que realizó el PRM para la elección del candidato alcalde por el municipio de Los Alcarrizos y donde esta demarcación no participó en el proceso convencional dejando a la dirección política de este partido la decisión de elegir el candidato en detrimento del sublevado e incontrolable alcalde Cristian Encarnación.
Un poco de su propia medicina
¿Qué tienen en común estas tres alcaldías que han copado la atención previo y post convención del PRM, generando un gran ruido negativo en torno al proceso?
Los tres precandidatos alcaldes que buscaban la reelección de sus alcaldías son fruto del transfuguismo: Manuel Jiménez tiene sus raíces en el Movimiento MPD, luego se juramenta en el Partido de la Liberación Dominicana, el cual abandona en el 2019 para ser candidato por el PRM. José Andújar, por igual, renuncia del PLD luego de no tener éxito en alcanzar la candidatura en su partido y pasa apoyar al PRM, convirtiéndose en alcalde 2020, así mismo vemos que el alcalde de Los Alcarrizos, que inicia su actividad política en el PRD, el cual abandona para pasar a ser candidato por PRM, si vemos la coincidencia los tres alcaldes se juramentan en el PRM para participar en las elecciones municipales 2020.
Cómo pretender ganar una reelección a una alcaldía cuando han tenido un desempeño deficiente en sus funciones y una desconexión con las militancias del partido que lo postuló en este caso el PRM, era de conocimiento público que los tres alcaldes tenían serios inconvenientes con las bases de la organización por no darle la participación en los cargos de sus ayuntamientos. ¡Qué ilusos! Pensar que la base del PRM votaría por candidatos recién llegados, beneficiados por el transfuguismo, con una ausencia de empatía con las militancias y sus dirigentes.
Estas tres alcaldías, Santo Domingo Este, Santo Domingo Oeste y Los Alcarrizos, eran de interés especial para miembros del entorno del presidente Luis Abinader y grupos de poder que desde ahora están colocando sus fichas para sus proyectos presidenciables para el 2028. Para entender el presente, poder visualizar el futuro, tenemos que estudiar el pasado. La juramentación de Francisco Peña en Santo Domingo Oeste dejó claro que estuvo apadrinada por el sector del expresidente Hipólito Mejía. Para la alcaldía de Santo Domingo Este la estrategia fue fina, donde vemos a Dío Astacio participando un evento oficial al lado del presidente Luis Abinader a solo cuatro días de la convención del PRM, para dejar claro que era el candidato de Palacio.
Una derrota anticipada
En la última candidatura a analizar fruto del transfuguismo –que por ser la última no deja de ser tan importante como las dos primeras–, influyeron varias variables. Primero, un alcalde incontrolable y desbocado que llegó al extremo de enfrentar los grupos de poder de Palacio. Segundo, eran los constantes escándalos en que se vio involucrada la alcaldía y una bajísima valoración de su gestión. En el caso particular de esta candidatura, en todo el proceso previo a las votaciones del primero de octubre, estuvo muy activo el poderoso ministro de la Presidencia y presidente del PRM, José Ignacio Paliza, que viabiliza la llegada al PRM del flamante exalcalde de ese municipio y ex secretario general del Partido Revolucionario Dominicano, Junior Santos, y su equipo político. Es un hecho que esta será la apuesta a la alcaldía en las elecciones municipales de febrero del 2024 como parte de la negociación para su integración.
Esperamos que estos tres alcaldes puedan entender que nunca pertenecieron a los grupos de poder de este Gobierno, y no eran confiables porque eran fruto del transfuguismo, ocupando candidaturas electorales en boletas ajenas a sus orígenes partidarios donde su militancia y dirigencia no le asimilaron, manifestando un alto nivel de desconfianza ya que su estadía en el PRM depende de sus intereses particulares. El tránsfuga nunca deja de ser un tránsfuga, y para ello basta un ejemplo, el alcalde de Los Alcarrizos, que después de la celebración de las primarias anunció casi en caliente su renuncia del partido de gobierno para juramentarse en la Fuerza del Pueblo. El transfuguismo a su máxima expresión.