Comparte Este Artículo
El presidente del Senado de la República, ingeniero Eduardo Estrella, se pronunció en desacuerdo con el método de lucha utilizado por el diputado Pedro Botello para reclamar la devolución a los trabajadores del 30% de los recursos acumulados en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que ha incluido la organización de varias manifestaciones que han derivado en desórdenes frente al Palacio Nacional, el Congreso y otros espacios.
El titular de la Cámara Alta deploró los incidentes que se registraron en los alrededores del Congreso el pasado 27 de febrero, previo al discurso de rendición de cuentas del Presidente Luis Abinader.
El legislador afirmó que los mecanismos que funcionan en la democracia son el diálogo y las instancias legales correspondientes y no la organización de revueltas.
«Yo creo, y al diputado Botello le tengo muy aprecio, pero creo que los mecanismos en democracia no es revueltas, más en el caso planteado en torno a un aspecto de la Ley de la Seguridad Social», manifestó el congresista.
Estrella recordó que actualmente una comisión bicameral del Congreso trabaja en procura de introducir las modificaciones que requiere la Ley 87-01 de Seguridad Social.
En ese sentido, el presidente del Senado, considera necesario e importante que a la referida norma se le hagan grandes modificaciones, pero que lo importante es que haya un espacio de diálogo entre todos los sectores para lograr un proyecto consensuado.
«De manera que considero que lo importante es sentarse todos los sectores, cada uno con las posiciones que tengan para que podamos sacar una ley que llene todas las expectativas que tiene el pueblo dominicano en torno a ese proyecto de modificación a la Ley de la Seguridad Social», puntualizó.
En términos similares se pronunció el pasado 27 de febrero el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco, quien criticó la metodología adoptada por Pedro Botello en su lucha en contra de las AFP.
Pacheco, calificó de «inaceptable y tremendista» que se haya convocado a una manifestación para reclamar el 30% justo el día de la Independencia Nacional y en momentos en que el presidente de la República rendía cuentas a la nación. Dicha convocatoria terminó en un gran desorden que tuvo que ser controlada por la Policía Nacional.
