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José Francisco Antonio Peña Gómez fue un hombre lleno de virtudes uno de los dominicanos más recordados del siglo pasado. Fue escritor, locutor, abogado, politólogo sin dudas unos de las figuras más trascendente de la política nacional, su vida estuvo llena de muchos sin sabores lo que estoy convencido que esos momentos difíciles fueron los que le ayudaron a convertirse en el hombre fuerte que fue.
A Peña se le recuerda como el gran líder y guía del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en donde militó desde el 1961 hasta su fallecimiento en el 1998, tres veces candidato presidencial 90,94 y 96 ex alcalde de la capital para el periodo 1982-1986.
Un hombre con una cultura general muy amplia hablaba múltiples idiomas: español, inglés, francés, portugués son de los idiomas que Peña hablaba, estudió en Harvard, en la Sorbona de París, Peña el gran líder de la Guerra de Abril del 65 perseguido por el Dr. Balaguer y su color perseguido por la tiranía de Trujillo.
Peña logró que se incorporada la doble nacionalidad para que los dominicanos no tuvieran que renunciar a su nacionalidad para poder obtener otra, logró que se creara el consejo nacional de la magistratura y la gran proeza del cincuenta más uno para las elecciones de nuestro país, un gran líder nacional y de dicho liderazgo nadie tiene dudas, un líder internacional un hombre querido y respetado por figuras internacionales, sus amigos Fidel Castro, Nelson Mandela, Olof Palme, François Mitterrand una gran cantidad de figuras que cuatrocientas palabras no dan para mencionar las personalidades que lo querían y respetaban.
Vicepresidente de la Internacional Socialista y presidente para América Latina, Peña fue un gran conciliador un amigo de toda la dirigencia del PRD partido para el cual escribió su himno, hoy no llorarán las viejas campanas al recordar a Peña hoy las campanas sonarán de valor de esperanza y valentía.
Peña luchó por la construcción de una democracia por la igualdad luchó para que fueran respetados los derechos de los humildes y para dar en el clavo se convirtió en el líder más grande de República Dominicana y América Latina no le importó que su piel fuera del color de la noche eso no le impidió nada: hoy él sigue siendo el estandarte de la nueva política dominicana.
