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En tiempos de la sobrevivencia del periodismo en la era digital nace País Político. Un reto auténtico, no solo para el mercado dominicano –que el internet trajo consigo la globalización real de todo, incluso del periodismo– sino para todo nuevo emprendimiento que aspire a servir información que cumpla con los criterios elementales del oficio. Con esa abrumadora y extenuante corriente de contenidos informativos que recibe el lector a través de todos los medios, como en un momento sugirió Gay Talese a los jóvenes profesionales, trataremos de «democratizar el periodismo», o lo que es igual, ser plurales, justos, sensatos y poner este medio a disposición de esa grandísima mayoría que no tiene voz.
Con una crisis al parecer interminable y que forzó el cierre de miles de periódicos, revistas y otras empresas informativas a nivel mundial, el buen periodismo se hace cada vez más necesario. Para el periodismo dominicano –y otras latitudes cercanas– debe producirse una nueva corriente semejante a lo que significó el fenómeno conocido como el boom de la literatura latinoamericana. Irónicamente, el periodismo vive un esplendor inimaginable en otros tiempos.
Es ese esplendor que nos motivó a sumarnos a la vastísima oferta periodística a la que el lector tiene acceso con un solo click. Es por ello que País Político nace como un medio especializado, contenido esencialmente pensado y elaborado sobre los protagonistas, los hechos y la historia de este mundo que tanto apasiona a los dominicanos. Trataremos de evitar la inmediatez de las redes sociales, esas «tecnologías perturbadoras», como escribió en el 2012 el redactor jefe del New Perspectives Quarterly (NPQ), Nathan Gardels, que «cuestionan todas las jerarquías», para por lo menos tratar de concebir un contenido reposado, analítico, reflexivo y orientador.
Si bien es cierto que la computadora, el teléfono celular y las redes sociales crearon nuevos hábitos y maneras de producir y consumir información, al final el periodismo de calidad sigue siendo el mismo desde sus antiquísimos orígenes. Más que generar contenidos trataremos de servir periodismo a través de cualesquiera sean las plataformas de transmisión. Recuperar la confianza del lector es una tarea pendiente, y con esta primera edición de País Político sembramos una semilla en tierra fértil, porque estamos convencidos que de esta crisis del periodismo solo sobreviviremos con un periodismo de calidad. El rigor impone un gran compromiso, y esa es la premisa que nos servirá de alimento.
